Los Mossos d’Esquadra detuvieron este miércoles a un hombre presuntamente implicado en la muerte del oso Cachou. Aunque la policía autonómica no ha desvelado su identidad, parece tratarse de un funcionario de Medio Ambiente del Conselh Generau d’Aran, así lo avanzaba TV3.
La muerte del oso Cachou, cuyo cadáver fue encontrado en la Val d’Aran el pasado 9 de abril se ha convertido en una verdadera trama. Las informaciones iniciales parecían apuntar a que la muerte se debió al ataque de otro oso y su posterior caída por un precipicio. Sin embargo, está versión nunca convenció a diversas asociaciones ecologistas como Ipcena, FAPAS o WWF que consideraban «muy poco probable» que la muerte de Cachou se debiera a causas naturales y exigían una investigación.
Tal fue la controversia que la historia dio un nuevo vuelco a mediados del mes de mayo, con la apertura de una investigación penal y la declaración del secreto de sumario por parte de la jueza de Viella. Estos hechos, algo poco habitual en casos relacionados con la fauna, parecían evidenciar que podía tratarse de un envenenamiento, acción castigada por el Código Penal con penas que van desde los 6 meses a los 2 años de cárcel.
“Si el caso ha sido derivado a un juzgado es porque se han detectado indicios de delito contra la fauna”, explicaba en mayo a Cima Norte la responsable del programa de Especies Amenazadas de WWF España, Gema Rodríguez.
Por ahora, para conocer todos los detalles, queda esperar a que finalice el procedimiento judicial y se levante el secreto de sumario. Sería el segundo oso (especie protegida y en peligro de extinción) que este año muere en el Pirineo a manos del hombre.
El presunto agente implicado
Según informaciones de La Vanguardia, «el detenido seria un agente incorporado pocos meses antes de la acción investigada a la patrulla de Medio Ambiente especializada en el seguimiento de la población de osos en el Valle de Arán.
La muerte del oso se habría producido como consecuencia de un envenenamiento premeditado en el que estaría implicado presuntamente el hombre ahora detenido. No han trascendido por el momento los detalles de esta acción ni los motivos del acusado para llevar a cabo el presunto envenamiento«.
Ante la noticia de la detención de uno de sus agentes, el Conselh Generau d’Aran ha emitido un breve comunicado. En él manifiesta su respeto por el procedimiento judicial y la presunción de inocencia de la persona implicada.
Cachou, un oso «conflictivo»
El oso Cachou llevaba instalado desde hace un año y medio un collar localizador GPS; así se pudo comprobar que fue protagonista de varios ataques a ganado equino en el Pirineo de Lleida. Desde la administración y ante la demanda de algunos sectores ganaderos, se amenazó con su expulsión del Pirineo si continuaba con un comportamiento «tan agresivo».
Como consecuencia, los grupos de Medio Ambiente de la Generalitat y del Conselh Generau d’Aran iniciaron un seguimiento continuo y aplicaron medidas disuasorias (condicionamiento aversivo) para evitar nuevas agresiones. Cachou no había vuelto a atacar desde el mes de octubre.
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