Cestas de alimentos artesanales para llevar el Pirineo a casa durante el confinamiento

Llevar la montaña a casa y echar una mano a los pequeños productores agroalimentarios del Pirineo, que afrontan una grave caída de ventas por el parón total del turismo, es el objetivo de una iniciativa lanzada esta semana por el Parc Natural de l’Alt Pirineu, en Lleida. Quien haya tenido que anular sus vacaciones pirenaicas de semana santa podrá consolarse un poco disfrutando de los quesos, los embutidos o las cervezas artesanales que una decena de productores locales envían a través de la web ‘Del Parque al plato’ (‘Del Parc al plat’).

“A quien más proveían los productores locales era a los restaurantes y los hoteles turísticos de la zona. Al cerrar todos por la crisis sanitaria hay una importante demanda que se va a pique”, explica a Cima Norte el director del espacio protegido, Marc Garriga Luján. 

El ser humano como modelador del paisaje

El Parc Natural de l’Alt Pirineu, situado entre las comarcas del Pallars Sobirá y el Alt Urgell, abarca un territorio de una gran belleza. Lo surcan profundos valles, con pueblos de montaña custodiados por cumbres de más de 3.000 metros, y cobija una biodiversidad excepcional. Sus valles y montes albergan una de las mayores poblaciones de oso pardo del Pirineo, en sus espesos hayedos y abetales se refugian los urogallos, y más allá del límite del bosque, en las cumbres nevadas, se extiende el reino del quebrantahuesos y el rebeco. 

Es una riqueza natural y un paisaje que se ha conservado de la mano de las gentes de la montaña, que han moldeado el territorio a lo largo de generaciones. Muchos de los productos de la iniciativa ‘Del parc al plat’ proceden del pastoreo, como la carne de razas autóctonas. “Hay unas 100 explotaciones de ganadería extensiva en el parque, muchas pequeñas de economía familiar, que ayudan a conservar este paisaje de mosaico, con pequeños prados, bosques y pastizales de alta montaña. Son los jardineros del parque”, cuenta el director. 

Garriga pone el ejemplo de las mariposas, muy beneficiadas por ese paisaje en mosaico: en el espacio protegido se han registrado 910 especies nocturnas y diurnas, el 51% de las presentes en la península ibérica, lo que lo convierte en uno de los espacios con mayor diversidad de mariposas de toda Europa.  

Apoyo a la economía local

Para el conservacionista, la venta directa online de cestas de alimentos artesanales es un modo de ayudar a una economía local que puede sufrir enormemente el impacto de la crisis del coronavirus. 

“En un territorio rural de montaña como este, el 70 u 80% de la economía depende del turismo, y el segundo sector más importante es el primario. Ya que el turismo no llega, al menos intentamos salvar el sector primario, que es básico para la economía rural y para mantener vivos los valles del Parque Natural”.

De momento la iniciativa ha sido un éxito. El día del lanzamiento de la página web vendieron 30 cestas. El precio oscila entre los 45,50€ de la más básica (con 8 productos) y los 130,50€ de la más completa (25 productos). Los productores se han comprometido a ofrecer sus alimentos a un precio especial, “entendiendo que muchas personas consumidoras también viven en una situación compleja de incertidumbre económica”.

Las complicaciones y la vulnerabilidad que sufren estos pequeños productores agroalimentarios por la crisis del coronavirus no son, por supuesto, exclusivas del Pirineo. De hecho, más de 600 organizaciones se han unido en redes sociales bajo el grito de #SOSCampesinado. Exigen al Gobierno medidas de apoyo y soluciones para que los agricultores y ganaderos a pequeña escala puedan seguir abasteciendo a la sociedad con alimentos locales y ecológicos.

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