El entorno de Santa Elena es un lugar de gran simbolismo en la tradición cultural del Valle de Tena. Ubicada en lo alto de un congosto, marca el límite al norte de la Tierra de Biescas. Aquí podemos encontrar un fuerte, una curiosa cascada de gran interés geológico, la fuente La Gloriosa con propiedades «curativas» y un dolmen milenario.
La belleza del lugar y su energía, se vuelven evidentes cuando lo recorremos. Estamos en un lugar sagrado desde tiempos inmemoriales. Además, cuenta la leyenda que en este lugar se ocultó la Emperatriz Elena tras una tela de araña para escapar de sus perseguidores.
En los alrededores de Santa Elena existen diferentes rutas. Y entre ellas, una de las más bonitas y entretenidas es la vía ferrata que en unos 20 minutos nos permite llegar hasta la ermita.
Track de la ruta
Vía ferrata Santa Elena
La vía ferrata se encuentra a los pies de la Ermita de Santa Elena. Equipada en el año 2002, la vía suma 95 metros de desnivel a lo largo de unos 2km de recorrido. Su corta duración y sencillez la convierten en una vía de iniciación perfecta. No tiene pasos complicados y tampoco muy áreos. Ideal para ir con peques.
Dificultad: K 1 | Aproximación 2′ |
Apta iniciación: Sí | Recorrido ferrata 20′ |
Total actividad: 60′ | Retorno 25′ |
Descripción de la ruta
A unos 3km del pueblo de Biescas, siguiendo la carretera que asciende el Valle de Tena, encontramos un desvío a la derecha indicado como «Ermita de Santa Elena». Lo tomamos y tras cruzar un puente aparcamos junto a unos carteles explicativos. Aquí nos equipamos con todo el material necesario (casco, arnés y disipador) y comenzamos la actividad.
Descendemos unos 2 minutos por una senda (PR-HU 78) hasta alcanzar el pie de la vía, junto a una antigua construcción. La vía ferrata se realiza con comodidad y es un terreno de iniciación perfecto para aprender a manejar el material. La ruta combina 6 resaltes verticales muy bien equipados con tramos casi llanos.
La vía ferrata Santa Elena se realiza en unos 20 minutos, que resultan bastante escasos. Pero luego las posibilidades son muchas. Una vez acabada la ferrata podremos visitar el Fuerte, caminar hasta le Ermita y la fuente «La Gloriosa» y descender unos metros hasta la cascada.
El descenso lo realizamos por la pista de acceso habitual y podemos aprovechar para visitar el dolmen de Santa Elena. En total, en 1 hora aproximadamente podremos haber conocido todos estos lugares. Una combinación muy buena entre deporte, cultura y naturaleza.
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