El otoño todavía lucha contra la llegada del frío y de las nieves. Basta con dar un paseo para comprobar que, a pesar de que algunos árboles comienzan a perder su hoja, los bosques todavía dibujan su otoñal acuarela de colores. Una de las mejores formas de disfrutar el otoño es recorrer el Bosque Betato, en el Valle de Tena.
El Betato, además de ser un espectacular entorno natural, es espacio de mitos y leyendas. Se cuenta que en este bosque las brujas del valle se reunían para hacer conjuros y aquelarres. La magia del lugar se vuelve palpable cuando recorremos sus senderos y si consultamos documentación histórica, existe constancia de que la Inquisición persiguió a mujeres de estos pueblos acusadas de brujería.
En cuanto a la toponimía, también tiene una clara relación con su leyenda. Betato parece ser una derivación aragonesa del verbo vetar. Así que podríamos traducirlo como «El Bosque prohibido».
El Betato se encuentra entre Piedrafita de Jaca y Tramacastilla de Tena y la ruta circular que recorre el bosque tiene una duración aproximada de 2 horas. Además, ofrece muchas variantes como visitar la Ermita de Santa Cruz, el barranco Gorgol, ascender hasta el Ibón de Piedrafita o visitar el Parque Faunístico Lacuniacha.
Track de la ruta
Descripción de la ruta circular Bosque del Betato
Dejamos el coche en Piedrafita de Jaca. Junto a la fuente del pueblo podemos aparcar sin problemas. Aquí ya encontramos algunos paneles explicativos que nos indican el inicio de la ruta y nos marcan el camino. Dos marcas rojas y púrpuras serán las que debemos seguir.
Comenzamos a caminar por una pista que nos ofrece unas hermosas vistas de la Sierra Tendeñera a la derecha y la Sierra de la Partacua a la izquierda. Desde aquí tenemos una panorámica espectacular del Bosque Betato y los colores que nos regala en estas fechas.
Encontramos un primer desvío a la Ermita de Santa Cruz. No tiene una especial belleza arquitectónica pero las vistas desde ella son muy buenas. Contemplamos el bosque y sus grandes gigantes protectores al fondo: Peña Telera y Peña Blanca.
Continuamos el camino y nos adentramos ahora sí en el espectacular hayedo del Betato. Una alfombra de hojas cubre el suelo y la magia del lugar acompaña nuestros pasos. Ahora nos podemos desviar hasta el Barranco Gorgol (muy recomendable). Desde aquí las vistas del barranco y el pantano de Bubal son formidables.
Volvemos para continuar la circular y ahora vienen los metros de mayor desnivel. Tras unos minutos salimos del bosque y alcanzamos la pista forestal de la Partacua. Si quisiéramos podríamos desviarnos hasta el Ibón de Piedrafita (45min) pero decidimos seguir adelantes.
Continuamos la pista, desde donde las vistas son hermosas, y pronto alcanzamos el Parque Lacuniacha. Desde aquí, en unos poco minutos y en 2 horas totales alcanzaremos el punto de partida. Es una ruta muy recomendable, que combina bosque con espectaculares vistas. Llena de magia y perfecta para realizar con niños.
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