El Pirineo nos regala cada año inviernos de nieve y hielo, y con él se abre ante nosotros un abanico con infinidad de posibilidades deportivas. Una forma perfecta para ir un poco más allá y otorgar complejidad técnica a las actividades, es la ascensión de picos por sus corredores. Hoy nos vamos hasta el Pico del Águila, en el Valle del Aragón.
Después de pasar Canfranc, y antes de llegar a la estación de esquí de Candanchú, se encuentra Rioseta, un espectacular circo glaciar que durante los meses de invierno guarda mucha nieve. Aquí existen varios corredores, y uno de los más populares es el que asciende por el Noroeste hasta el Pico del Águila.
El corredor tiene 270m y está catalogado con dificultad D-. Se compone de seis largos y dependiendo de la cantidad de nieve encontraremos las reuniones en posiciones más o menos cómodas. El ascenso es sencillo, con dos o tres pasos (depende de la cantidad de nieve) que son los que dotan a la ruta de cierta complejidad.
La aproximación hasta la base del corredor es de unos 45min, y el resto del recorrido es de unas 2 horas. Una vez superado el corredor, en tan solo 10min estaremos en la cima. El descenso se puede realizar rapelando el mismo corredor (opción recomendable, aunque no si hay gente ascendiendo por detrás) o bajar caminando en un descenso un poco confuso y largo que puede durar más de 2 horas.
Material
| Arnes, casco y piolets | Dos cuerdas de 60m |
| Material de reuniones (mosquetones de seguridad y cordinos) | Algún fisurero o friend |
| Dos tornillos de hielo (14cm) | Ancla y estaca de nieve |
Descripción de la ruta Corredor NO Pico del Águila
Ruta realizada en Marzo del 2019
Dejamos el coche junto al antiguo cuartel militar de Rioseta. Desde aquí ya contemplamos como amanece en este espectacular rincón del Pirineo. A nuestra izquierda queda el corredor, al cual nos acercamos por una pendiente considerable durante 40min.
Una vez a los pies de la vía comienza el corredor. Es bastante conocido por lo que es fácil encontrar gente haciéndolo. En nuestro caso, coincidimos cinco cordadas. Es importante tener paciencia, precaución y respetar al resto de escaladores.
Durante el ascenso encontramos la nieve en muy buenas condiciones. Hay huella, por lo que ascendemos con cierta comodidad. En el comienzo hay un pequeño resalte y luego se asciende fácil hasta la primera reunión. El resto de la vía no tiene grandes complicaciones excepto dos resaltes más en los largos 4º y 5º. Aquí es donde tendremos que utilizar los tornillos de hielo.
Algunos realizan el ascenso encordados en ensamble, aunque nosotros preferimos asegurar en cada una de las reuniones. Después de unas 2 horas (el tiempo también depende mucho de la cantidad de nieve y gente que haya), terminamos el último largo (la reunión se encuentra en un pino) y llegamos al collado. Desde aquí ya vislumbramos claramente la cima y siguiendo la huella haremos cumbre en unos 10 minutos.
El descenso más recomendable es rapelar el mismo corredor. Sin embargo, si hay mucha gente es muy probable tirarles hielo y nieve, por lo que nosotros decidimos bajar por otra vía. Al parecer hay un rapel en la cara norte que te lleva a una senda de descenso. Nosotros no pudimos encontrarlo y decidimos seguir la huella que desciende el valle hasta prácticamente Canfranc Pueblo. Un descenso largo que puede durar unas 2 horas.
Sin duda una vía muy bonita y agradecida. Perfecta para iniciarse en el mundo de los corredores (con los conocimientos que ello implica claro).
Puedes leer más rutas del Pirineo en este enlace.
Dejar un comentario